¿Por dónde empezar?
¿En el enigma de tus pensamientos, dónde trazar la primera línea? ¿Por qué asumir que la carencia de sentido está divorciada de la realidad? Nos han susurrado que nuestras existencias son raquíticas, enfermas y perversas, moldeando una legión de ídolos que se esfuerzan por dictar la senda, sin comprender en verdad el único paradigma que los rige. Nos instan a cambiar estos paradigmas, nuestras creencias, nuestros anhelos, cuando en el fondo lo que debemos develar es el funcionamiento intrínseco de la vida misma. Cada sistema, por más oscuro que parezca, subsiste con un propósito. ¿Acaso tiene propósito que algo se haya erigido para sembrar el sufrimiento?
El mito de la Verdadera Felicidad
Y entonces, ¿por qué Nietzsche nos deslizó la idea de que la Verdadera Felicidad residía en la moralidad de los esclavos, en la resignación a la mediocridad y en la domesticación de nuestros instintos y deseos más naturales? ¿Acaso no se oculta, en la penumbra de esta búsqueda, la pulsión por vivir de manera aislada, debido a la vergüenza de su propia sombra, como un elemento esencial de nuestra integridad? ¿¡No es esto la locura!?
La verdad, según este autor, ha decidido dar un paso al costado. Pero, ¿acaso en algún momento estuvo realmente viva y respirando? ¿O siempre se movió en las sombras, escurridiza como el humo? Que en la actualidad la felicidad se haya transformado en una mercancía no significa que haya dejado de existir. Y que la corriente predominante de pensamiento haya intentado demostrar que el pensamiento excéntrico también tiene su lugar, no debería abrir las puertas de otra dictadura. La concreción de un caballo, ya sea blanco, negro, marrón o una combinación de todos esos colores, no desvanece la noción perfecta de lo que es un caballo, de lo contrario, la libertad quedaría muda. La verdad solo exhala su último aliento cuando dejamos de rastrearla, cuando cedemos ante la fatiga o perdemos la fe en su existencia. Este encuentro no trata de formas, sino de esencia; de que la verdad, libertad, dignidad y paz son tejidos intrínsecos de la evolución. ¡El amor, sin duda, aún tiene su espacio para florecer!
La verdad, según este autor, ha decidido dar un paso al costado. Pero, ¿acaso en algún momento estuvo realmente viva y respirando? ¿O siempre se movió en las sombras, escurridiza como el humo? Que en la actualidad la felicidad se haya transformado en una mercancía no significa que haya dejado de existir. Y que la corriente predominante de pensamiento haya intentado demostrar que el pensamiento excéntrico también tiene su lugar, no debería abrir las puertas a otra dictadura. La concreción de un caballo, ya sea blanco, negro, marrón o una combinación de todos esos colores, no desvanece la noción perfecta de lo que es un caballo, de lo contrario, la libertad quedaría muda. La verdad solo exhala su último aliento cuando dejamos de rastrearla, cuando cedemos ante la fatiga o perdemos la fe en su existencia. Este encuentro no trata de formas, sino de esencia; de que la verdad, libertad, dignidad y paz son tejidos intrínsecos de la evolución. ¡El amor, sin duda, aún tiene su espacio para florecer!
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“En el libro La Alegoría de la Verdad, de Fernando Osta, de manera compleja, pero con sencillez, nos lleva a descubrir cómo llegar a la esencia de nuestro ser autentico a través de tener consciencia que la verdad, basada en el amor y el dar, es 10 que nos da libertad, dignidad y por último la sensación de paz, que nos lleva al bienestar integral. “
“Como consultor experto en empresas familiares, tuve la oportunidad de cursar los Programa de Coaching Psicológico Integral y Coaching por competencias. Programas que tienen en su base el estudio y la lectura del magnífico texto hoy un libro de la ALEGORIA DE VERDAD; para mi formación y experiencia de vida uno de las mejores teorías que he tenido a mi alcance y que me sirve mucho para comprender los entramados de las conductas humanas de las empresas que asesoro. “
La verdad, según este autor, ha decidido dar un paso al costado. Pero, ¿acaso en algún momento estuvo realmente viva y respirando? ¿O siempre se movió en las sombras, escurridiza como el humo? Que en la actualidad la felicidad se haya transformado en una mercancía no significa que haya dejado de existir. Y que la corriente predominante de pensamiento haya intentado demostrar que el pensamiento excéntrico también tiene su lugar, no debería abrir las puertas a otra dictadura. La concreción de un caballo, ya sea blanco, negro, marrón o una combinación de todos esos colores, no desvanece la noción perfecta de lo que es un caballo, de lo contrario, la libertad quedaría muda. La verdad solo exhala su último aliento cuando dejamos de rastrearla, cuando cedemos ante la fatiga o perdemos la fe en su existencia. Este encuentro no trata de formas, sino de esencia; de que la verdad, libertad, dignidad y paz son tejidos intrínsecos de la evolución. ¡El amor, sin duda, aún tiene su espacio para florecer!
Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.
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